SÁBANAS LIMPIAS
George Franklin ©
Apenas tendí la cama con sábanas limpias.
Tienen arrugas, pero están lavadas, huelen
Fresco, el tejido un poco áspero en mis manos.
Cuando tú llegues prepararé café, el tuyo
Con la leche hervida, espumosa, el mío negro
Con sabor a azúcar quemada, que me recuerda
El cielo de noche en otra latitud, el barrio
Donde caminamos, la luna aún no surgía
Sobre los cerros, los techos bajos,
Los anuncios de hoteles, las ventanas
Con postigos cerrados, voces que venían
De algún lado, música, ladraba un perro
Detrás de una pared blanca, elevada,
Mis labios te rozaban el cuello. Después
De la cena, voltearemos las sábanas,
Nos deslizaremos el uno junto al otro, aún
Poseeremos nuestros días, aromas
De los que no podemos deshacernos, sándalo
Adherido a tu camisón, cáscara de limón,
Cebolla en mis dedos. Cuando nos tocamos,
Podríamos estar en cualquier parte.